28 junio 2017

Dobles raseros

Para que ustedes vean la prevalencia y poder de lo que en un artículo anterior llamamos "Pensamiento único".

Anécdota real. Conversación en el trabajo. Estoy tratando de explicar que el comunismo no prohibe comprar cosas, y como no quiero dar una conferencia me limito a señalar que Karl Marx compraba ropa fabricada por empresas capitalistas. Bien, es un hecho, no una opinión. Me limito a dar un poco de información, no estoy dando una charla ni un mitin. Y Fidel Castro usaba chándals de Adidas.

¿Cual es la reacción? Pues bastante hostilidad. No contra el mensajero, menos mal, pero sí un rechazo frontal al mensaje. De repente saltan de un tema a otro, como andanadas de cañón contra la lógica.

Me gusta comparar estas actitudes con algo que aparece en la película "Matrix": Las personas que están esclavizadas por el Sistema se transforman en Agentes cuando detectan algo que amenaza a Matrix, y pasan a defender al Sistema a muerte. En el mundo real pasa algo parecido en cuanto algo cuestiona la ideología dominante.

De repente, entre un tema y otro, sin centrarse en ninguno, alguien habla de lo mal que están en Cuba y pone como ejemplo:

-Porque allí hay camareros que tienen la carrera de química, y no pueden trabajar en lo que han estudiado y tienen que trabajar de camareros.

Tomen aire después de leer esto. Sin duda ustedes se dan cuenta de que lo mismo ocurre en España, o peor, que el químico ni siquiera ha podido trabajar de camarero en España y se ha tenido que ir a Inglaterra o Alemania para poder trabajar de camarero.

Claro, la persona que lo dijo se acabó dando cuenta de que aquí ocurre lo mismo. Pero lo que quiero señalar es que durante un instante no se dio cuenta. Puso como ejemplo de fracaso del sistema cubano una cosa que se da en todos los países.

Bueno, creo que si nos paramos a pensar un poco nos daremos cuenta de que no puede existir ningún sistema en el que todo el mundo trabaje de lo que ha estudiado. Ni en el capitalismo, ni el socialismo, ni en ningún otro modelo. Vale, está el feudalismo, donde la mayoría de la gente no estudia y asunto arreglado.

Pero lo que quería señalar es que hay un doble rasero para juzgar el éxito. Al socialismo se le considera un fracaso en cuanto surge la mínima dificultad o algo se desvía de una idea utópica que no estaba ni en la cabeza de los que lo teorizaron. En cambio, el capitalismo puede montar guerras y hacer cualquier barbaridad que nunca se le cuestiona.

Volviendo al tema de la ropa y el consumo en general, la mayoría de la gente no sabe que en los países socialistas la gente cobraba un sueldo y se lo gastaba en tiendas. Creo que tienen una idea difusa de que el Estado les llevaba uniformes de color gris a sus casas y una bolsa de papel con las raciones de comida. Hasta me han definido "libertad" como poder elegir entre Coca-Cola y Pepsi. La parodia existe en la realidad. Este nivel de ignoracia es algo buscado y trabajado a fondo.

Y la idea de boicotear empresas... El socialismo consiste en expropiarlas, no en que los consumidores hagan boicots para que cambien sus políticas. El boicot no cuestiona la propiedad. También han habido organizaciones católicas pidiendo el boicot contra un programa de televisión. Es una herramienta de uso común y eficacia limitada.

Otra cosa es que aparezca un piernas diciendo que hay que hacer boicot a Coca-Cola y después se haga una foto bebiéndose una lata. Eso es ser hipócrita, desde luego.

No hay comentarios: