24 abril 2019

Analizando carteles y campaña electoral

Bueno, no estoy siguiendo la campaña con la profundidad que merece... O tal vez no merezca más. Pero como es tradición intermitente en este blog, por lo menos vamos a analizar los carteles electorales.

En primer lugar el de Pedro Sánchez, que para eso es el presidente actual y el favorito en las encuestas.

Ah, las encuestas del CIS y de los medios. La de veces que hemos dicho que son siempre mentira y se hacen para orientar el voto... Pero eso no quiere decir que tengamos datos para interpretarlas. No tengo claro lo que pretenden al situar al PSOE con ventaja. No sé si buscan desmoralizar a los peperos (que no creen en ellas) o al contrario, que el CIS está controlado por gente afín al PP y quieren que los votantes del PSOE se confíen y no vayan a votar.


Vamos con el cartel: Pedro destaca por aparecer en blanco y negro con gesto serio. Como muy serio. Como diciendo que estas elecciones son un tema seriote. Y no sonríe, o sea, Míster España no sonríe, Pedro el Guapo no sonríe. Supongo que sigue pareciendo un fucker, pero más compacto. Un rostro pétreo, de contornos redondeados y rocosos, erosionados por el viento de los milenios. Con intensidad de héroe Hollywoodiense. Y con canas por el flequillo. Un héroe de acción, pero maduro.

Quizás pidieron esto desde el principio, quizás lo decidieron después de ver que si sonríe no parece un estadista. No sé, es una decisión inusual. Aparte, el slogan me parece muy malo. "Haz que pase" se puede interpretar como que pase de largo, como que pase esta pesadilla y España vuelva a ser gobernada por los herederos de Franco y Aznar. ¿"Haz que suceda" era muy largo? ¿Quiénes se han creído que hacen estas cosas sin consultarme a mi, si yo sé de todo?

Pero hay cosas peores...


Apocalipsis Photoshop. "Uncanny Valley", que dirían los anglosajones. Le han borrado las marcas de acné, le han estirado la sonrisa, le han hecho un estropicio digital. Izquierda Unida siempre eligiendo mal a los que les hacen la campaña. Un punto a favor, sin embargo, es que no usen a Pablo Iglesias, cuya foto se había vuelto demasiado omnipresente y evidenciaba un híperliderazgo.

Pero si queremos continuidad y falta de imaginación nos vamos a los carteles del PP.


A los de 2019, con Casado, quería decir:


Unidad estética con su pasado más inmediato (y corrupto), los mismos colores... No me extrañaría que todas las fotos las hubiera hecho la misma persona. La única novedad es el logo del partido, que antes parecía un botón web y ahora parece... Parece... Esto... Bueno, hay algo ahí que es como un corazón con los colores de la bandera de Españñññña.

Este cartel nos indica que por primera vez en su historia el PP se está peleando con otros dos partidos por mangonear el simbolismo de la bandera patria. Y que les falta imaginación. Como sus votantes tampoco quieren sobresaltos el slogan es "Valor seguro". En fin, el partido de Rajoy que prometió bajar los impuestos y los subió, pero valor seguro. Ejem. Pues eso.

Por otro lado, Casado parece estar en una competición de decir tonterías y quedar en ridículo. Ha llegado a decir que bajaría el salario mínimo, para luego negar que lo hubiera dicho a pesar de que está grabado. Caben tres opciones para su comportamiento durante la campaña:

1. Retraso mental.
2. Alguien de su equipo le echa burundanga en la bebida.
3. Sus asesores le han dicho que o monta el pollo para que se hable de él o va a conseguir el peor resultado de la historia.

Para lo de montar pollos también tiene a la famosa Cayetana Álvarez de Toledo, una marquesa muy pija con un cuello muy largo, a la que ha enchufado en las listas de Barcelona sólo para crear conflictos con el catalanismo. El razonamiento es que hacerse la víctima de los malvados catalanes dará muchos votos al PP en el resto de las Españas. Vamos, lo mismo que enviar a la policía a pegarle a la gente que quería hacer el paripé de un referéndum. Hay que eternizar el conflicto porque da votos, en vez de solucionarlo.

Luego, aparte, Cayetana ha ido a un debate donde ha dicho poco menos que los violadores de La Manada eran inocentes. O sea, no ha dicho eso, ha dicho que está en contra de que "sólo si una mujer dice que sí es que sí", que también puede no decir nada. Vamos, lo mismo que el juez aquel que quería absolver a los violadores porque la víctima no estaba todo el tiempo diciendo que No.

Uno tiene la sensación de que antes había más cordura en el PP. Que no quiere decir que fueran buenos o mejores que estos, pero por lo menos se callaban para disimular. ¿Es una estrategia para que se hable de ellos o ya no hay nadie al volante?


Y el que faltaba, el señor que ya no sabemos si se llama Albert o Alberto. Otro que se cree que está en una película de acción, con banderas españolas a tope por detrás pero que podría ser el fuego de una explosión. Y como es un hombretón no mira atrás cuando hay explosiones, no, en las pelis el héroe ya sabe que ha explotado algo detrás y no necesita mirar. Ni apuntar cuando dispara, ni llevar la cuenta de la munición.

Sin duda el cartel que más se presta a la parodia (¿Es Albert Rivera o Steven Seagal?).

Por otro lado también se apunta a la estrategia antes comentada de acudir a sitios sólo para montar el pollo. Ir adonde no sea bien recibido, hacerse la víctima, y creer que eso le va a dar muchos votos en otros sitios. En este caso Rivera montó un pollo en un pueblo vasco donde nadie le votaba y le recibieron con lazos amarillos en apoyo de los presos políticos catalanes.

Pero como apuntaba en un artículo anterior podría ser que la prensa haya dejado de apoyar a Ciudadanos. Nada menos que en "El Mundo" ha aparecido el artículo Desastre Rivera donde le afean su conducta por rechazar un pacto con el PSOE. Porque la prioridad de la oligarquía española es un gobierno PSOE-Ciudadanos, como ya intentaron en su momento, y aunque ni Rivera ni Sánchez quisieran las presiones serían enormes. Yo si fuera Sánchez pondría como condición la dimisión de Rivera, pactando con su partido pero sin él. Y tras la investidura me limpiaría el culo con el acuerdo.

LOS DEBATES

Poco me extenderé ya, pero los debates han sido divertidos. Es decir, para lo que suelen ser los debates. La ausencia de Vox ha sido un duro golpe para Sánchez, que presionó para que incluyesen a Abascal, así que tuvo que salir al campo a mantener el tipo sin arriesgar demasiado. Ser el primero en las encuestas es lo que tiene.

Pablo Iglesias reapareció y fue el más serio en ambos debates, el único que hizo alguna propuesta seria o trató de sacar algún tema importante.

Pablo Casado demostró que es un gran actor. Es capaz de decir con aplomo cualquier cosa que le escriban sus guionistas, aún sabiendo que es mentira. Interpretó el papel más querido por los votantes de derechas, aquellos que piensan en España como un gran cortijo y quieren lo mejor para los señoritos, que no vengan otros a quitarlos de ahí porque habrá desorden. Apeló al "valor seguro" del slogan, al voto útil frente a las fantasías neofranquistas de Vox, y a una serie de cifras y datos (sobre empleo y déficit, por ejemplo) inventados sobre la marcha. Con una falta de vergüenza total.

El más divertido, sin embargo, fue Rivera, que iba "nervioso" y sacaba fotos con marco de Quim Torra o de Otegi, como si fuese Doraemon sacando cosas de su bolsillo mágico. Fue maleducado, chabacano, interrumpió, se echó al barro... Y como la prensa afín le rió las gracias del primer debate siguió con su estrategia de hacer el ridículo en el segundo. No sin antes hacerse esta foto:

Este señor afirma que nunca ha tomado cocaína
En fin, si quedó algún espectador capaz de tomarse en serio a Rivera le aconsejo que deje de tomar cualquier medicación que esté tomando.

16 abril 2019

La rama dorada (23)

Queda comprobado que la hipótesis de localizar la vida de Balder en el muérdago está en armonía con los giros primitivos del pensamiento. Puede parecer una contradicción que a pesar de estar su vida en esa planta le matase un golpe de la misma, pero en los cuentos de hadas vimos que Koschei el inmortal muere por el golpe del huevo o la piedra en la que estaba externada su vida o su muerte, el mago muere cuando ponen bajo su almohada la piedra en que escondió su vida o su muerte, y al héroe tártaro se le advierte que puede ser muerto por la flecha o espada dorada en la que está depositada su alma.

El espíritu del roble depositaba su vida en un lugar seguro, el muérdago, que no está ni en el cielo ni en la tierra, a salvo de todo peligro. Hemos visto en capítulos anteriores que el hombre primitivo procura conservar la vida de sus deidades humanas situándolas entre cielo y tierra, del mismo modo que el muérdago no podía tocar el suelo sin perder sus propiedades mágicas.

Se expone una superstición similar sobre el fresno que crece sobre el ramaje de otro árbol, eficaz contra la brujería por no haberse criado en el suelo.

La idea de que el muérdago no fuese el instrumento de la muerte de Balder sino el recipiente de su vida se apoya en su analogía con una superstición escocesa, el destino de la familia Hay de Errol dependía del muérdago que crecía en un gran roble. Cuando el roble se marchitó la familia perdió sus propiedades.

¿Era la "rama dorada" el muérdago? Así lo dice también Virgilio en la Eneida. Frazer ha expuesto que el rey del bosque de Aricia personificaba al árbol en que crecía la rama dorada, quizás un roble. Por eso antes de matarle era necesario quebrar la rama dorada. Romper el muérdago, y probablemente tirárselo encima. Para completar el paralelo sólo se precisa que el rey del bosque fuera primitivamente quemado, muerto o vivo, en el festival del fuego del solsticio de verano, que se celebraba en ese bosque. El fuego perpetuo que ardía en el bosque era alimentado probablemente con madera sagrada de roble. Su reinado anual se acortaría o alargaría por la regla que le consentía vivir mientras probase con la fuerza de su brazo el derecho divino que le asistía. Pero sólo escaparía del fuego para morir por la espada.

Sostiene Frazer que en una época muy remota se efectuaban en Italia los ritos que después los romanos encontraron entre los celtas de la Galia, y que si hubiesen llegado a Noruega habrían encontrado lo mismo con pocas diferencias.

Pero el muérdago sólo es amarillo cuando está seco. Se hace la analogía con las semillas de helecho, que florecen como oro o fuego la víspera del solsticio. Las leyendas le atribuyen el poder de encontrar oro y tesoros ocultos. Por el principio de semejanza la semilla de helecho descubre oro porque ella misma es dorada, y se cita otra leyenda que dice que estas semillas son la sangre del sol. El muérdago también tiene la facultad de encontrar tesoros ocultos, y se cita una costumbre sueca de hacer varitas mágicas con él.

Siguiendo con la Eneida, Eneas llega a la laguna Estigia y el barquero se niega a admitirle en su barca. Entonces Eneas saca de su vestido la Rama Dorada, y el barquero se calma de inmediato y le admite en su barca.

Se describe a Balder como similar al sol, pero es un espíritu del roble. Podría ser que los antiguos, al sólo saber hacer fuego frotando madera, creyeran que el fuego estaba contenido dentro de la madera, como un jugo o savia. Y el árbol alcanzado por un rayo ha sido "recargado" de fuego. Parece ser que el roble es el árbol más alcanzado por el rayo en Europa. ¿No se decía que el muérdago había caído del cielo? También se le llama "escoba de rayo" en Alemania. ¿Pudieron pensar los antiguos que el rayo generaba el muérdago? ¿Nos dice el mito de Balder que el golpe de muérdago que le causó la muerte fue la caída de un rayo sobre el roble? El dios del cielo y el trueno, que lanza rayos sobre los árboles, debió ser la deidad principal de los pueblos arios desde antes que llegasen a Europa y conocieran los robles.

Todo lo dicho sobre Balder en los robledos de Escandinavia, con todas las reservas debidas en asunto tan incierto, quizá pueda aplicarse al sacerdote de Diana, el rey del bosque en Aricia. Pudo ser la encarnación de Júpiter, que bajaría de los cielos en un rayo, para morar en la Rama Dorada que crece en el roble sagrado. La diosa a quien servía y con quien se desposaba no era otra que la reina de los cielos.

¿Hay alguna conclusión, tras 800 páginas de erudición? Frazer vuelve a repasar su teoría de que el pensamiento mágico precede a la religión y conduce a ella, y que cuando la religión se revela también insuficiente se descubre la ciencia, en los tres casos intentando descubrir los secretos y leyes que gobiernan la Naturaleza. Y conjetura que quizás en un futuro otra teoría del pensamiento podría desplazar a la ciencia.

FIN