26 julio 2018

El cine de acción, y más reflexiones

Hace un tiempo me quejaba de que en el cine de acción moderno cada guión era como un videojuego de pasar pantallas; oh, un peligro en esta pantalla, resuelto, pasamos a la siguiente, ahora el prota necesita un objeto/aliado para pasar a la siguiente, oh, ya ha pasado y ahora se enfrenta al monstruo guardián, lo pasa y se enfrenta al Final Boss.

Pero no creo que el problema sea causado por los videojuegos de los años 80, eso no tiene mucho sentido. Tampoco podemos saber si la culpa es de los guionistas o de toda la tropa que manda más que los guionistas. Pero he encontrado una posible causa para exponer ante los lectores, si es que ustedes también han notado que el cine de acción actual es más esquemático en comparación con el del siglo XX, más parecido a un parque de atracciones o una sucesión de pantallas, y como espectadores nos importa muy poco lo que ocurra a los personajes. Si ustedes no han notado descenso de calidad, o no conocen los clásicos estilo "Arma letal" para poder comparar, pues nada...

Mi teoría actual es que han interpretado mal los consejos que se dan en los cursillos de escritura. Y no culpo sólo a los guionistas, es muy posible que cualquier productor haya hecho uno de esos cursos y crea que sabe más que sus guionistas (es sólo que no tiene tiempo para sentarse a escribir o que aún no se le ha ocurrido una gran idea, sí, debe ser eso).

Antes de exponer el caso permítanme una digresión, que espero les resulte amena. Mi conocimiento de estos cursos se basa exclusivamente en lo que he leído de un autor llamado Jim Butcher (conocido por la saga "Dresden Files"), el cual al principio de su carrera estaba frustrado por no ser capaz de publicar y se apuntó a uno de estos cursos. No le gustaba lo que decía la profesora, pensaba que se equivocaba, y para demostrarlo decidió usar todos sus consejos en una obra. Y se la publicaron. Con lo cual aceptó que la profesora tenía razón, y a partir de ahí utilizó esa fórmula mágica para todos sus libros. Que fueron muchos.

También cuenta una anécdota sobre su otra saga conocida, "Códex Allera". La idea surgió de un debate online sobre si el éxito de una novela tiene más que ver con la idea o con el estilo del autor. Jim defendía que con una idea mala se puede hacer una novela exitosa y aceptó un reto de alguien que sostenía que si la idea es mala no hay dios que la levante. Y el reto fue que su rival le dijera dos ideas horrorosas y él escribiría una novela de éxito usando esos dos conceptos.

Su rival se deleitó con la anticipación y dijo: "Legión romana perdida", uno de los tópicos más absurdos de la ficción fantástica, que recuerdo haber leído en historias de Solomon Kane (una legión sobrevivía en una ciudad perdida de la selva africana y no habían cambiado sus costumbres ni dejado de hablar latín en los más de diez siglos que llevaban allí). Bien, Jim Butcher aceptó y aguardó a que su rival lanzase la segunda idea absurda. Y su rival dijo: "Pokémon". Y de ahí surgió la idea de Códex Allera y lleva varios libros publicados. Fin de la anécdota. Volvamos al tema de los cursos.

Cursos para aspirantes a escritores. Cómo conseguir que publiquen tu novela. Bien, la estructura de una novela (y valdría lo mismo para escribir un guión) se basa en las escenas. Cada escena consta de un personaje, a través de cuyo punto de vista vemos la acción, que tiene un objetivo, lo cual genera un conflicto (la pregunta), y este lleva a un resultado (la respuesta). Juntamos una escena tras otra y tenemos toda la historia. Jim aconseja que el resultado sea casi siempre un desastre y se produzca un crecendo de desastres para darle más emoción.

Pero aparte de las escenas están las "secuelas", que es lo que ocurre entre las escenas y lo que hace que al lector (espectador) le importe algo de lo que está ocurriendo a los personajes. La secuela se basa en:

1. Reacción emocional al resultado de la escena.
2. Reacción lógica y razonamiento.
3. Anticipación.
4. Elección. Decidir el próximo paso que dará lugar a la próxima escena (conflicto).

Y esto es importante. Así expuesto de forma técnica tal vez no se entienda, pero es importante, es lo que hace que se entienda a los personajes y se empatice con ellos.

Y según la temática habrán variaciones en el peso de cada ingrediente. Por ejemplo, la literatura romántica se basará en menos conflicto y más secuela, sobre todo en emoción y anticipación. El terror será generoso con la dosis de anticipación. El misterio en el razonamiento. Y en la acción tendrá más peso la escena y la parte de elección de las secuelas.

Pues bien, creo que los guiones modernos no han entendido la necesidad de las secuelas. Les dijeron que en la acción lo que cuenta es la escena y ahora son una colección de escenas sin apenas secuelas, o con secuelas muy mal escritas y puestas casi por compromiso, o que no sobreviven al montaje porque alguien de arriba quiere más acción y que no se pierda ritmo en cosas que no sean pelearse y explotar cosas. O quizás es que ahora que tengo más información y distingo entre escena y secuela es cuando me doy cuenta de lo que falta en la acción moderna.

Ahora, si tuviera tiempo, podría hacer un análisis de una película antigua y una moderna. Podría comparar ambas versiones de "Conan", o de "Desafío total", pero tendría que volver a ver las versiones nuevas y no me apetece nada. O las de "Furia de titanes", o "Kickboxer", o algún otro remake absurdo e innecesario.

Así pues, y ya para finalizar, hagan estos ejercicios ustedes cuando vean una película de acción, antigua o moderna. Sí, amigos, los años 80 ya son la Antigüedad clásica.

 Cine de acción moderno, ¿guiones de videojuego?

20 julio 2018

La supervivencia de los más ricos

Douglas Rushkoff, persona que escribe libros sobre tecnología, recibió el año pasado una invitación a dar una charla en un resort privado de super-lujo. Y cuenta ahora su experiencia.

Este hombre pensaba que la charla sería para un centenar de inversores de banca, y que iba a cobrar por ello una elevada cantidad (alrededor de la mitad de su salario anual como profesor) sólo por hablar del futuro de la tecnología. No es que le gustasen especialmente este tipo de charlas, porque en la ronda de preguntas todo va dirigido a dónde invertir los dineros y es gente a la que no le interesa aprender sobre la tecnología en sí misma o su impacto en la sociedad. Pero la pela es la pela.

Al llegar al lugar resulta que la charla consiste en sentarse en una mesa con cinco tipos super-ricos que pertenecen al escalón más alto de los fondos de cobertura (hedge funds) y tras un rato de hablar de chorradas, oh sorpresa, el autor descubre que a estos no les interesa el discurso que traía preparado sobre el futuro de la tecnología sino que vienen con preguntitas.

Y empezaron suaves: ¿Ethereum o bitcoin? ¿Va en serio la computación cuántica? (...) ¿Qué región sufrirá menos impacto con la crisis climática que se nos avecina, Nueva Zelanda o Alaska? ¿Funcionará el proyecto de Google de copiar el cerebro de una persona, y su conciencia sobrevivirá a la transición, o morirá y renacerá como algo nuevo y diferente?

Finalmente uno de ellos explica que está terminando de construirse un bunker subterráneo y pregunta "¿Cómo puedo controlar a mis fuerzas de seguridad después del Evento?", refiriéndose a que cree que podría ocurrir alguna forma de colapso de la sociedad (virus, revueltas, guerra nuclear, etc.). El madmaxismo, vaya.

Y el resto fue una hora dando vueltas al mismo tema. Tenían claro que necesitarían sicarios armados para defenderse del populacho, pero no tenían claro cómo mantener su lealtad cuando el dinero deje de tener valor. ¿Y si los matones deciden elegir a su propio líder? Hablaron de usar cerraduras especiales para controlar el suministro de comida, o de que los guardias llevasen collares "disciplinarios" (¿con un explosivo?), o de usar robots si la tecnología se desarrolla a tiempo.

El autor se da cuenta de que realmente están hablando del futuro de la tecnología, para ellos la tecnología consiste en eso, en mantenerse por encima del populacho. No en hacer del mundo un lugar mejor para todos.

Aquí el artículo original:

https://medium.com/s/futurehuman/survival-of-the-richest-9ef6cddd0cc1

Prosigue con reflexiones de cómo se ha llegado a esta actitud hacia la tecnología, y concluye diciendo que aconsejó a esta gente que tratasen bien a sus subordinados. O que tratasen de evitar ese colapso. Por supuesto los super-ricos no estaban interesados en evitarlo, creen que eso es imposible a estas alturas y que ya sólo pueden preparar su escape.

Aparte del egoismo evidente, creían que no tenían ningún control sobre el futuro. Habían aceptado el peor de los escenarios y hecho sus planes para aislarse, y si es necesario escapar a Marte.

Y ahora mis reflexiones.

No descubrimos nada nuevo, ya sabemos cómo es esta gente. Lo nuevo es que tengan ese miedo. A priori, y a menos que ellos sepan cosas que nosotros no sabemos, yo diría que es un miedo infundado. La gente acepta hoy en día toda forma de tiranía, vive en un aplastamiento cognitivo, acepta la versión de los hechos que les dan los poderosos, y no se espera una revuelta si no la dirigen los propios poderosos. Y si hace falta se puede comprar a media Humanidad para que mate a la otra media.

El problema real sería que el dinero dejase de tener valor, claro. Un escenario que ahora mismo no sé cómo se podría hacer realidad, si no es mediante un colapso de la civilización que no vendrá de un día para otro.

Mis consejos para estos super-ricos serían dos, a elegir:

-Que efectivamente se vayan a Marte. Cuanto antes. La gravedad diferente y la radiación solar harán el trabajo. Es más probable que lancen una estación espacial como en Elysium, pero ello implicaría llevarse bien entre toda la élite, y no es un escenario de colapso total.

-Que aprendan de los faraones, funden una religión en la que ellos sean dioses vivientes, y se hagan enterrar en pirámides. Puede funcionar durante un par de generaciones.

12 julio 2018

Pdro Sánchez, presidente

Las movidas políticas españolas siguen siendo tan animadas como siempre. Es decir, que si a usted nunca le han interesado seguirá la tendencia, y si a usted le ponían de los nervios hace diez años seguirá la tendencia... Nuestra memoria es engañosa. Puede parecer que esto cada vez va más rápido o que la gente cada vez está más agitada, pero en realidad todo sigue igual.

Por primera vez en la historia del régimen actual, eso sí, ha triunfado una moción de censura. ¿Por qué se ha hecho ahora, en 2018 y después de que el PP logre aprobar los presupuestos, y no al poco de comenzar la legislatura, es algo que nunca sabremos. Seguro que detrás de los focos han habido conspiraciones la mar de divertidas.

¿Cómo resumir lo que ha pasado, para la posteridad? Empezaremos por recordar que hubo unas elecciones en las que ningún partido lograba imponer a su candidato. El PP no sumaba, y el PSOE decidió pactar primero un programa de 150 puntos con Cs y proponer a Pedro Sánchez, pero Podemos no se unió a esa maniobra porque no podía apoyar ese pacto neoliberal con Cs. El PSOE hábilmente culpó a Pablemos del fracaso y de que se tuvieran que repetir las elecciones.

Los medios bramaron contra esa repetición. "La gente no quiere volver a votar", "Que los políticos se pongan de acuerdo, que para eso les pagamos un sueldo", y casualmente mucha gente repetía lo mismo que decían los medios. La casualidad.

Pero se repitieron las elecciones y esta vez el PP consiguió el apoyo de Cs y la abstención del PSOE, con lo cual Rajoy volvió a ser presidente. Eso sí, Pedro Sánchez fue defenestrado primero, como si fuera un obstáculo para esta abstención.

¿Qué ocurrió realmente? ¿Fue algo real esta destitución de Sánchez y su posterior victoria, o fue una pantomima para que no se "manchase" apoyando a Rajoy con la abstención?

El PSOE siempre ha sido un partido fiel a la oligarquía, y por lo que hemos visto se deduce que al principio les ordenaron pactar con Cs (para echar a Rajoy y Montoro, con quienes parte de esta oligarquía estaba molesta) y luego les ordenaron dejar gobernar al PP (porque no querían elecciones por tercera vez y aceptaron a Rajoy como mal menor). Es la explicación más probable a lo ocurrido.

Durante el periodo en que Sánchez estuvo destituido se apuntó a que la razón podría haber sido que estaba a punto de lograr un pacto con Podemos y nacionalistas. Bien, pues de ser así le ha costado un poco hacerlo fructificar; Sánchez ganó las primarias en mayo de 2017 y no ha hecho la moción de censura hasta un año después. Así, el momento ha venido a coincidir con una serie de cosas, tales como que los presupuestos para 2019 ya están aprobados por el PP y el PNV, que el PNV luego va y apoya la moción, que Podemos se hallaba en mal momento tras la polémica del chalet de Iglesias, que Cs había subido mucho en las encuestas tras el juicio al PP por la trama Gürtel y corruptelas varias, y que la situación con Cataluña se había deteriorado hasta niveles nunca vistos.

Mención especial cabe para la actitud de Ciudadanos frente a la moción, pasando de la sorpresa al estupor, con un paréntesis de despiste en medio. Mi interpretación de los hechos, sin prueba alguna, es que cuando el PSOE presentó la moción se quedaron sin saber si apoyarla y pidieron órdenes a los que mandan de verdad. Es decir, que Rivera llamó a Manuel Conthe (ex-presidente de la CNMV y enlace entre Ciudadanos y los que lo financian), este tuvo que hablar con Oliu y otros figuras del Ibex, y atendiendo a las encuestas le dijeron a Rivera "Tú pide elecciones, que las puedes ganar" y este mayordomo de la banca, desconociendo las leyes que impiden convocar elecciones cuando se ha puesto en marcha una moción de censura, se subió al estrado y pidió elecciones.

Otra posibilidad, no del todo reñida con la anterior impresión de nula autonomía por parte de Cs, es que sí conocieran las leyes y aún así reclamasen elecciones con el objetivo de mantener a su caladero de votos indignado y movilizado. ¿Qué ha sido de aquellos que hace dos años decían que no podemos estar votando tantas veces y que los políticos deben ponerse de acuerdo para ahorrarnos ese despilfarro? Ah. La casualidad de que quizás ahora tengan unas ganas locas de ir a votar.

Porque la parte más derechista de las redes sociales está que trina con el resultado de la moción, lo consideran un "golpe de Estado", y piden elecciones cuanto antes. En twitter circula un ingenioso hashtag (#ArteFacha) que recopila una buena muestra de obras que relacionan a Pedro Sánchez con todas las plagas del Apocalipsis y lugares comunes del derechismo español (ETA, Cataluña, Al Qaeda, Venezuela, y el Paint del Windows).

Por otro lado y entrando de nuevo en la especulación personal, no creo que Ciudadanos sean los únicos monigotes de la función, y me temo que esta moción haya triunfado porque otra parte de la oligarquía así lo ha querido. Hartos del espectáculo que se estaba dando con Cataluña y la fuga de empresas se habría decidido hacer un cambio de caras que posibilite una salida dialogada al conflicto. Un conflicto del que se nutría Ciudadanos para crecer, y que les impulsó a crear una "plataforma cívica" de la "España Ciudadana" para disputarle al PP el monopolio de la bandera rojigualda. Algo que ningún partido había logrado, y eso que tanto PSOE como UPyD lo habían intentado. (No cuento en ello ni a Vox ni a las Falanges varias, por ser irrelevantes)

Desde octubre hemos asistido a un aquelarre de banderitas en los balcones que tiene mucho que ver con entender la bandera como un arma que agitar contra un enemigo. La actitud "En tu DNI pone que eres español, jódete", o sea, entender que ser español es un castigo impuesto. Pero los nacionalistas son los demás, por supuesto.

No sólo Ciudadanos ha entrado en depresión al ver que les robaban la merienda. Rosa Díez ha dicho que se unirá a "La Resistencia" contra el gobierno de Sánchez. Esta señora me daba la impresión de ser poco inteligente para dirigir un partido y de tener un ego insufrible, pero ahora también da la impresión de que sufre algún trastorno. Es el juguete roto de la partitocracia. Mientras tanto, Mariano Rajoy, ha dejado la política con su habitual pasotismo. Aunque también pudiera ser que su salida estuviera pactada desde el momento en que empezó la legislatura.

Y, bueno, quizás haya llegado el momento de hablar del gobierno...

Un gobierno que, por desgracia y como cabía esperar, será más bien continuista porque no puede ser otra cosa. Pero que tendrá que jugar a la propaganda y los gestos, al estilo Zapatero, para parecer algo diferente. De ahí que haya más ministras, o se recurra a fichajes mediáticos como Pedro Duque o el ya dimitido en tiempo récord Máxim Huerta.

En fin, sólo nos queda esperar a ver si aparte de los gestos se hace algo por desinfectar TVE, retirar la reforma laboral, o la Ley Mordaza. Y por ver si los que financiaban a Cs se sienten satisfechos con lo que haga el PSOE y dejan de tirar el dinero en semejante pandilla de arribistas y chaqueteros. Y por ver quien sustituye a Rajoy al frente del PP. Quizás Cs acabe como UPyD, quizás sea el PP el que acabe como la UCD. No sé, viendo como está Podemos puede que incluso volvamos al bipartidismo.