¿Qué es el PSOE?

El PSOE actual no es el mismo partido que fuera fundado por Pablo Iglesias en 1879. No solo porque sus ideas hayan cambiado con el tiempo, sino porque no existe continuidad ideológica entre ambos, sino una apropiación de sus siglas por parte de un grupo de oportunistas.

Lo que sigue a continuación debe mucho al libro "La CIA en España" de Alfredo Grimaldos, capítulo 9, "Isidoro y Mister PESC".

Isidoro era el alias de Felipe González, un joven abogado sevillano nacido en 1942, hijo de un empresario ganadero que había militado en Izquierda Republicana (el partido de Azaña) y la UGT. Felipe no tenía tradición "socialista" familiar, y en su juventud militó en las Juventudes Obreras Católicas, de inspiración democristiana (lo que viene a ser de derechas, vaya).

Sin embargo, por lo que fuera, en 1962 se afilia a la Juventudes Socialistas y más tarde al PSOE. En 1970 figura en la Comisión Ejecutiva.

El PSOE tenía una sección en el interior de España, que era ilegal por ser oposición a la dictadura de Franco, y una sección exterior compuesta por exiliados. El PSOE había sido muy importante en la Segunda República pero durante el franquismo estuvo muy disminuído. Los opositores a Franco preferían ingresar en el PCE, que además tenía más respaldo exterior (todos los países comunistas, mientras que EEUU apoyaba el régimen franquista).

En 1974 ocurre en Portugal la "revolución de los claveles", y a los seis meses el congreso del PSOE en la ciudad de Suresnes, Francia, donde se produce la conquista del poder. Portugal está a un paso de que triunfen los comunistas, Franco está enfermo y se teme por su vida. Felipe González se convierte en secretario general del PSOE desplazando al anterior, Rodolfo Llopis, que no reconoce las resoluciones adoptadas en Suresnes.

El ahora general Monzón (asiduo a tertulias en los medios) era por entonces el capitán del SECED Manuel Fernández Monzón, y el SECED era el servicio de inteligencia creado por Carrero Blanco. Monzón habló con Felipe González en un restaurante de Madrid, en presencia del también "socialista" Enrique Múgica, para garantizarle su viaje a Suresnes. De hecho, el SECED facilitó pasaportes a varios miembros del PSOE que interesaba que fuesen al congreso.

El comisario Manuel Ballesteros confesó a la periodista Pilar Urbano que la dictadura propiciaba el resurgir del PSOE para ahogar al PCE. La policía incluso ayudó a pasar documentos del PSOE en el interior al PSOE en el exterior.

El comandante Miguel Paredes, del SECED, y el inspector Emi Mateos, habían empezado a trabajar en lo que llamaban "Operación Primavera": una serie de contactos con algunos miembros del PSOE del interior (Nicolás Redondo, Enrique Múgica) para ver hasta dónde llegaba su izquierdismo, y si podían acercarse a la línea moderada del SPD alemán. Interesaba que estuviesen más cerca de la OTAN que de la URSS, y que sobre todo no dieran problemas a los "poderes fácticos" españoles: Nada de nacionalizar la banca (como estaba haciendo Portugal con el "Proceso Revolucionario en Curso").

Paredes recuerda que entregó varios pasaportes a condición de que los devolvieran al regresar de Suresnes, y que Felipe no le devolvió el pasaporte.

Los delegados que llegan a Suresnes en 1974 representaban, en teoría, a 3.000 militantes del PSOE en el interior, pero Grimaldos calcula que la cifra real debía ser la mitad. Así de escasos eran los "socialistas" españoles. En realidad se estaba refundando un partido a partir de cenizas.

En Portugal ni siquiera había un partido socialista histórico y hubo que inventar uno. Según Joan Garcés, Mario Soares tenía contacto con la CIA desde los 60 y en 1973 recibió ayuda bajo patrocinio alemán para fundar un partido socialista portugués.

Los servicios secretos norteamericanos y la socialdemocracia alemana se turnan en la dirección de la Transición Española, con dos objetivos: impedir una revolución tras la muerte de Franco y aniquilar a la izquierda comunista.

Según Garcés, el "socialista" Carlos Zayas informaba a la embajada de EEUU sobre las personas que podrían sumarse a combatir al PCE si recibieran apoyos materiales. Entre ellos señala a Mariano Rubio, que sería años después gobernador del Banco de España, y desvela como principal agente del PCE a un tal Federico Sánchez (alias de Jorge Semprún, que después cambiaría de bando y llegaría a ser ministro de Cultura).

Otro hombre de la CIA era el antiguo dirigente del trotskista POUM Julián Gorkin. Se dedicaba a dirigir publicaciones financiadas por la CIA a través del "Congreso por la Libertad Cultural", y en París era vicepresidente del llamado "Centro de Documentación y Estudios", que intentaba potenciar a la oposición monárquica y socialdemócrata. Gorkin entra en el PSOE en 1973. También estaba un tal Manuel Simón, dirigente de las Juventudes Socialistas de Toulouse, que había sido expulsado de Portugal acusado de ser agente de la CIA.

Según el ex-agente de la CIA Philip Agee en los años 50 se crearon dos fundaciones por parte de los dos grandes partidos alemanes (RFA), la CDU y el SPD. A través de estas fundaciones se canalizaba el dinero de la CIA para "construir la democracia" tras la Segunda Guerra Mundial. Después de los años 60 estas fundaciones empezaron a apoyar a los partidos hermanos en otros países. En 1980 las fundaciones alemanas (Friedrich Ebert Stiftung y Konrad Adenauer Stiftung) tenían programas en funcionamiento en 60 países y manejaban 150 millones de dólares.

Sus operaciones fascinan a los americanos, en especial los programas de formación y las subvenciones que hacen llegar a los socialdemócratas de Grecia, España y Portugal, justo antes de que cayesen sus dictaduras e inmediatamente después. Cuando cae la dictadura de Salazar el Partido Socialista Portugués, que acaba de ser fundado, no tiene seguidores en Portugal, pero con 10 millones de dólares desde Alemania y algunas remesas de la CIA se convierte en el partido gobernante.

Rodolfo Llopis, ahora ex-secretario general del PSOE, funda el PSOE (Histórico) y se pelea en los tribunales por usar las siglas contra el PSOE (Renovado). La escisión ya se había planteado en 1972, se hace efectiva en 1974, y el Tribunal Supremo le dará la razón a los "renovados" en 1977. El partido de Llopis pasa a llamarse Partido Socialista a secas, y PASOC en 1982.

En 1979 Felipe González impone que desaparezca el término "marxismo" de los estatutos del partido. Justo de la Cueva deja la militancia en ese momento y declara "El PSOE va donde diga la CIA a través de Willy Brandt. Hasta en el propio Bundestag alemán se acaba de denunciar que la Fundación Friedrich Ebert del SPD recibe dinero directamente de la CIA".

Si despojamos a la palabra "socialismo" de su sentido marxista ¿Qué nos queda? La propaganda del PSOE se basará en conceptos vagos como "socialismo es libertad", "progreso", etc.

En 1982 el PSOE gana las elecciones. Ya solo falta confirmar la entrada en la OTAN que había firmado Calvo Sotelo, y entrar en la Comunidad Europea (actual Unión Europea) aprobando el tratado de Maastricht y renunciando a nuestra soberanía.

«El referéndum fue un modelo antológico de pucherazo, pero a muy pocos políticos les interesaba cuestionar el resultado, conscientes de que la victoria del "No" habría repercutido no sólo en la adhesión europea, sino hasta en nuestro propio devenir político», escribe Pablo Castellano, veterano militante socialista que hizo campaña contra la OTAN.

Recomiendo leer este libro para más datos.

Es posible que algún lector se muestre incrédulo ante lo narrado. ¿Por qué se va a interesar tanto la CIA, nada menos que la CIA, en un país como España? Yo le respondería que se interesan por países aún menos importantes, que montaron un golpe de estado en Chile en 1973, que si no has estudiado esa época o la has vivido no tienes idea de cómo estaba de revuelto el mundo... Y que los datos se pueden contrastar, Grimaldos apunta sus fuentes en el libro. Y no es solo la CIA, buena parte del proceso lo llevaban elementos del franquismo para asegurarse su futuro.

Fijaros en cómo tanto España, como Portugal y Grecia, han estado en manos de EEUU y Alemania desde cuando eran dictaduras, y que no nos han soltado desde entonces. Y que así nos ha ido.

Hay que reconocer que el PSOE también hizo cosas buenas. ¿Las habría hecho igualmente otro partido de izquierdas? Seguro que sí ¿Las habría hecho un partido de derechas? Puede que sí. Depende.

También hay que reconocer que en el PSOE ha entrado gente buena que no tiene ni idea de esta supeditación a intereses de la oligarquía nacional y extranjera. Claro, que cuando ven que el partido en bloque vota a favor de ciertas cosas deberían replantearse su militancia.

Y siempre reconoceremos que Zapatero tuvo un par de huevos retirando las tropas de Iraq. Aunque luego tuvo que aportar más tropas a Afganistán y otras movidas, mirar a otro lado cuando pasaban aviones de la CIA con gente secuestrada... Por cierto, Carme Chacón recibió la oferta de un lobby yanqui para financiar su campaña.

http://planeta-simio.blogspot.com.es/2012/02/el-rey-estaba-enterado-del-23-f.html

http://es.wikipedia.org/wiki/Proceso_Revolucionario_en_Curso
http://es.wikipedia.org/wiki/Partido_de_Acci%C3%B3n_Socialista
http://es.wikipedia.org/wiki/Partido_Socialista_%28Portugal%29

http://es.wikipedia.org/wiki/Socialismo
http://es.wikipedia.org/wiki/Psoe

https://www.google.es/?gws_rd=ssl#q=%22la+cia+en+espa%C3%B1a%22
http://ecodiario.eleconomista.es/interstitial/volver/50023286782/politica/noticias/5677009/04/14/El-analisis-Los-lobbies-de-Hillary-Clinton-se-vuelcan-en-la-campana-de-Carme-Chacon-en-Espana.html